La idea de este proyecto nace de la necesidad de hacer un mueble para poner mi tocadiscos y que tuviese espacio para dichos discos, así que aquí estamos. Una pieza simple, madera de pino tintada al café, unos aros de hierro para soportar a los vinilos, unos cuantos grados de inclinación y la tenemos. Un mueble para tener en el centro del salón, tiene una cierta especularidad y mires donde mires le vas a encontrar su simetría no obstante las patas inclinadas. Fina, elegante pero cálida.

Medidas: 90×45 cm Altura: 60cm